Mi bebé ronca al dormir ¿es normal?
Sin importar si tu bebé es el primer o ya has tenido hijos con anterioridad, cada uno de ellos es una oportunidad nueva para descubrir tu paternidad o maternidad y conocer lo más posible cada una de las curiosidades que genera su nuevo mundo.
Uno de los factores que hoy en día preocupa más a los padres es la higiene del sueño. En ella se busca que el pequeño tenga horas óptimas y realmente reparadoras, las cuales lo ayuden a crecer de forma sana.
Sin embargo, pueden existir diversos factores que nos generen dudas o inseguridades al respecto, tal como lo son los ronquidos de bebé. Si bien estos están más asociados a los adultos, los menores suelen hacerlo de forma más común de la que se piensa.
Desde luego, al decir que es común, no significa que no debamos controlarlo y preocuparnos si los ronquidos se vuelven cotidianos o a nuestro pequeño le cuesta respirar mientras duerme.
A continuación te hablaremos de los ronquidos en los bebés, cuándo son normales y qué puedes hacer al respecto.
- Los bebés suelen roncar ocasionalmente y suave. Esto es más común cuando están resfriados, pues no son capaces de respirar bien por la boca y su nariz en estos casos está parcialmente obstruida.
- Si este tipo de ronquidos persiste si el bebé se cura, serán considerados normales; sin embargo, es necesario consultar con el pediatra.
- Si el bebé además de roncar mientras duerme, hace esfuerzos para respirar o incluso deja de hacerlo durante unos segundos, suda por la noche o adopta posturas extrañas para dormir, será necesario consultarlo con el pediatra, pues podría indicar la existencia de un problema de salud.
Otras razones por las que tu bebé puede roncar son…
Infecciones respiratorias
Como consecuencia de los resfriados, las vías respiratorias se pueden inflamar produciendo el ronquido . Este ronquido desaparece a la par de los síntomas del resfriado y el bebé vuelve a respirar con normalidad.
Alergias
Tales como la rinitis y el asma, afectarán las vías respiratorias de nuestro bebé, pudiendo propiciar el ronquido.
Regurgitaciones o reflujo gastroesofágico
Se producen cuando los alimentos, en este caso la leche, ascienden del estómago hacia el esófago, la boca e incluso hasta la nariz sin esfuerzo. El reflujo se ha relacionado con el ronquido.
Ser fumador pasivo
Esto afecta a los bebés que se ven expuestos al humo del tabaco. A mayor exposición, más probabilidades hay de que el bebé ronque. En estos casos podría tener más síntomas como tos o dificultad para respirar con normalidad, entre otros.
Vegetaciones y amígdalas de gran tamaño
Las vegetaciones o adenoides, unas glándulas situadas detrás de la nariz, en la parte alta de la garganta, y unas amígdalas agrandadas, pueden obstaculizar el paso del aire por la vía respiratoria superior, provocando así el ronquido, aunque esta causa es más frecuente en niños de más edad.
Problemas anatómicos
Una forma inadecuada de la cavidad bucal, de la nariz o de la mandíbula son también factores que pueden acabar desembocando en ronquidos. Estos casos pueden ser hereditarios.
Sin duda alguna, todos los padres buscamos el bienestar de nuestros pequeños sin importar cuáles sean las razones que desencadenan los ronquidos. Es importante tomar en cuenta que estos sonidos no siempre significan que nuestro bebé está durmiendo profundamente y muy cómodo.
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